Cada 31 de mayo se celebra en todo el mundo el Día Mundial Sin Tabaco, con datos que demuestran como la epidemia mundial del tabaco provoca siete millones de muertes anuales. Este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha lanzado una campaña bajo el lema de “El tabaco rompe corazones”, donde dan a conocer los devastadores daños que provoca el tabaco a la salud cardiaca. 

La iniciativa busca llamar la atención acerca de la relación existente entre el tabaco y las cardiopatías. Además, se confirma que existe una fuerte motivación para la toma de conciencia de que el consumo de cigarrillos constituye la segunda causa de enfermedades cardiovasculares después de la hipertensión arterial. Se insiste en que fumar es un factor de riesgo importante para la salud del fumador y también para la de los que no consumen tabaco. De siete millones de defunciones anuales, 900.000 corresponden a personas que no fuman, pero que sí respiran  tabaco ajeno.

Esto es lo que definen como tabaquismo pasivo, respirar el humo del tabaco del fumador cuando nos encontramos en los espacios tanto cerrados como abiertos. Por eso destacan la importancia de hacer hincapié en no fumar en los espacios cerrados, estando presente tantos niños como mujeres embarazadas.

La concejal de Sanidad, Rosa Pérez, ha resaltado la importancia que tiene el informar y concienciar a los jóvenes de las consecuencias que conlleva el consumo de tabaco para la salud. Por eso desde su delegación se trabaja anualmente,  a través de la Oferta Educativa Municipal,  con los colegios de la ciudad, informando y concienciando a los jóvenes del daño causado por este hábito.