Unas obras que han finalizado y que han contado con una inversión municipal de 48.570 euros (más 10.199,70 euros de IVA) y han sido ejecutadas por la empresa Construcciones Luna.

Esta actuación ha permitido ensanchar el actual acerado y proporcionar mejor servicio y comodidad a los vecinos y sobre todo a los usuarios, padres, alumnos y comunidad educativa del colegio público San Isidro Labrador.

Alconchel ha señalado que “el Ayuntamiento ha acometido esta obra de mejora y ensanchamiento del acerado para dar respuesta a la demanda tanto de los padres de los alumnos como del personal de la comunidad educativa que nos lo había solicitado”, asegura Alconchel. 

La inversión ha incluido la instalación de un nuevo mobiliario urbano, con dos bancos de asientos que dan mejor servicio a los padres y madres, “esta obra ha permitido también ganar bastante en accesibilidad para las personas con movilidad reducida; y finalmente, la buena calidad de servicio del nuevo acerado podría reducir el tráfico de vehículos a la hora de entrada y salida del colegio, ya que algunos podrán optar a partir de ahora de acudir al centro andando en lugar de en coche”.

Además se ha conseguido que todo el acerado de la avenida que abarca la fachada del colegio cuente un ancho de un mínimo de 1,50 metros, siendo en algunos casos de 1,60 metros, y aumentándose en la entrada del colegio a 4 metros de anchura, cumpliéndose la normativa; “en nuestro municipio todos los colegios cumplen la normativa y solamente faltaba San Isidro, por lo que solucionamos esta deficiencia”, apunta Alconchel.

También se ha construido un espacio al final del acerado para albergar a los contenedores de basuras.

Esta obra ha respetado prácticamente todos los aparcamientos y tampoco ha afectado al tráfico de la avenida durante su desarrollo.