Todos los trabajadores, alrededor de treinta, han sido sido recuperados del ERTE y el grupo de mantenimiento de Asansull se ha encargado de poner a punto las instalaciones. Escribano aseguró que esta reapertura supone un reto, dado el gran número de profesionales que se necesitan para mantenerlas abiertas, así como los gastos de suministro que se generan. Por eso, espera que los ciudadanos de La Línea respondan haciendo uso del complejo, cuidándolo y siguiendo todas las instrucciones de prevención de Covid-19 para conseguir mantener a raya la pandemia, tal y como ha ocurrido hasta ahora en todos los centros de Asansull.

El alcalde aseguró estar: “muy contento porque creo que es una de las joyas de la corona que tenemos en la ciudad en cuanto a instalaciones deportivas en un complejo gestionado por la asociación Asansull, un auténtico referente de calidad y compromiso en nuestra ciudad”. También agradeció a los trabajadores, usuarios y a M.ª Luisa Escribano poner estas instalaciones a disposición de los linenses con las máximas garantías de respecto por las normas sanitarias.

La piscina de verano tendrá un horario de 8.00 a 20.00 horas y no será necesario solicitar cita previa. Los 10.000 metros cuadrados de la zona al aire libre permitirán un aforo de 65% por ciento, un máximo de 351 personas, con espacios balizados para delimitar la distancia de seguridad y señalización de circuitos de entrada y salida, número de usuarios de vestuarios y baños, uso de gel hidroalcohólico y sábanas desechables para el alquiler de tumbonas. Asimismo, el personal de limpieza intensificará el protocolo de limpieza con productos virucidas en la piscina, la cafetería y el gimnasio. El precio para acceder a la piscina será de 1,50 euros para los abonados al complejo deportivo, y de 5 euros para el público en general, de lunes a viernes no festivos, y 7euros, los fines de semana, con precios especiales para menores de 15 años, mayores de 65 y personas con discapacidad.

La piscina cubierta se prevé abrir a partir del 6 de septiembre.